El vermut es más que una bebida. Es historia, es ritual, es encuentro. Y en Madrid, pocas cosas evocan tanta autenticidad como tomarse un vermut de grifo en una taberna centenaria rodeado de buen ambiente. Por eso, nos llena de orgullo anunciar que Casa Alberto, uno de nuestros Restaurantes Centenarios, ha dado un paso importante: ha lanzado su propio vermut, elaborado con esmero, identidad y mucho conocimiento.
Este nuevo producto no solo refuerza la propuesta de la casa, sino que contribuye a la recuperación de una de las tradiciones más castizas de la capital: la hora del vermut.
Un paso valiente y sabroso: el vermut de la casa
Después de años sirviendo vermut de grifo de reconocidas marcas, Casa Alberto ha decidido crear su propio vermut artesanal, diseñado para reflejar su historia, su carácter y la esencia de la taberna. Este nuevo vermut es el resultado de un largo proceso de investigación, pruebas y selección de ingredientes, respetando siempre el legado del aperitivo madrileño.
El resultado es una bebida equilibrada, aromática, con cuerpo, que se disfruta sola o acompañada de unas buenas tapas, y que tiene como objetivo convertirse en el nuevo clásico de los vermuts de grifo en Madrid.
¿Qué es el vermut? Un clásico que vuelve con fuerza
El vermut (o vermouth) es un vino macerado con una cuidada mezcla de hierbas, raíces, especias, flores y frutas. Entre los ingredientes más comunes se encuentran la artemisia, la canela, el clavo, el cardamomo, la piel de cítricos o incluso la vainilla. A esta base se le pueden añadir otros elementos como arropes, mistelas o azúcares provenientes de la uva, que ayudan a conseguir su dulzor característico.
Una bebida con historia
Originario del norte de Italia, el vermut se popularizó rápidamente en Europa y, desde finales del siglo XIX, se convirtió en una bebida esencial en el aperitivo español, especialmente en ciudades como Madrid y Barcelona. Su consumo creció tanto que se hizo imprescindible en las barras de las tabernas madrileñas, donde el «vermut de grifo» era toda una institución.
El vermut de grifo: una tradición muy madrileña
Durante décadas, el vermut de grifo fue símbolo de sociabilidad y sabor. Se servía directamente desde barriles o dispensadores, bien frío y con una rodaja de naranja o aceituna. Acompañado de unas tapas de boquerones, gildas, mejillones en escabeche o ensaladilla, representaba la esencia del aperitivo dominical, ese momento sagrado para muchos madrileños.
Hoy, esa costumbre ha regresado con fuerza, convirtiéndose en tendencia entre jóvenes y mayores, nostálgicos y nuevos descubridores de lo castizo. El vermut ya no es solo cosa de abuelos: está más vivo que nunca.
Casa Alberto: una taberna con historia y alma
Fundada en 1827, Casa Alberto es uno de los establecimientos más emblemáticos de Madrid. Situada en pleno barrio de Las Letras, esta taberna histórica ha sido testigo de siglos de vida madrileña, desde tertulias literarias hasta celebraciones populares.
Con su barra de estaño, sus azulejos originales y una cocina que respeta la tradición, Casa Alberto se ha ganado un lugar privilegiado en el corazón de quienes aman la gastronomía madrileña con raíces. Y ahora, suma a su legado una nueva joya líquida: su vermut de grifo propio, disponible exclusivamente en el local.
Vermut de Madrid: presente y futuro
Madrid está viviendo una auténtica revolución en torno al vermut. Muchas bodegas, bares y restaurantes están recuperando o reinventando esta bebida, y cada vez son más los que se atreven a producir su propia receta.
El caso de Casa Alberto es especialmente significativo porque combina tradición y modernidad: se trata de un producto nuevo, pero fiel a una forma de entender el aperitivo que lleva casi 200 años sirviéndose en ese mismo local.
Un vermut que sabe a historia y a Madrid
El vermut de grifo de Casa Alberto es más que una bebida: es una declaración de intenciones, un homenaje a la tradición castiza y una invitación a saborear la vida con calma y autenticidad. Si eres amante del buen beber, del tapeo madrileño, de los lugares con alma, no puedes dejar pasar la oportunidad de probarlo.
Acércate a Casa Alberto o a Casa Ciriaco y descubre un vermut que huele a madera, a especias, a historia y a Madrid.