Los caracoles en salsa picante son una de las joyas más representativas de la cocina tradicional española. Este plato, de raíces humildes pero de sabor intenso, ha sido durante generaciones una tapa estrella en bares y tabernas de ciudades como Madrid, Córdoba o Sevilla. Hoy te enseñamos cómo prepararlos en casa paso a paso, con todos los trucos para que te salgan tiernos, sabrosos y con ese punto de picante que los convierte en irresistibles.
Además, te contamos dónde probarlos si visitas Madrid, como en la mítica Taberna Antonio Sánchez, uno de los restaurantes más antiguos de la ciudad.
¿Por qué son tan populares los caracoles en salsa picante?
Los caracoles no solo forman parte de la gastronomía tradicional, también son un símbolo de reunión, tapeo y cocina lenta. Este guiso destaca por:
- Su intensidad de sabor, gracias a la combinación de especias, embutidos y tomate.
- Su versatilidad, ya que cada región aporta su toque personal.
- Y por ser un plato ideal para compartir, acompañado de pan crujiente y una copa de vino.
Ingredientes para caracoles en salsa picante (4 personas)
Caracoles:
- 1 kg de caracoles limpios (frescos o cocidos)
- 2 hojas de laurel
- Agua y sal para limpiar y hervir
Para la salsa:
- 2 cebollas medianas (finamente picadas)
- 3 dientes de ajo (laminados)
- 100 g de jamón serrano en dados
- 100 g de chorizo picante en dados
- 2 guindillas secas (o al gusto)
- 1 cucharadita de pimentón (dulce o picante)
- 400 g de tomate triturado
- 1 cucharada de harina (opcional)
- 150 ml de vino blanco
- 1 cucharadita de comino molido
- 1 cucharadita de tomillo seco
- 1 cucharadita de orégano
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra
Cómo limpiar caracoles frescos
Antes de cocinarlos, es muy importante purgar y limpiar bien los caracoles, ya que pueden contener impurezas. Aquí te dejamos los pasos básicos:
- Purgado: Déjalos en un recipiente con agua y sal durante 24 horas. Cambia el agua varias veces hasta que salga limpia.
- Lavado: Frótalos con las manos bajo el grifo.
- Hervido inicial: Cuécelos 10 minutos con laurel. Retira la espuma y escúrrelos.
Consejo: si compras caracoles ya cocidos o congelados, sigue las instrucciones del paquete. Es una buena opción si quieres ahorrar tiempo.
Receta paso a paso de caracoles en salsa picante
1. Sofrito base
En una cazuela grande, añade un buen chorro de aceite de oliva. Sofríe las cebollas y los ajos a fuego medio hasta que estén dorados.
2. Añadir los embutidos
Incorpora el jamón y el chorizo, y deja que se cocinen unos minutos hasta que suelten su grasa. Esto aportará un sabor profundo a la salsa.
3. Especias y tomate
Agrega la cucharada de harina (opcional, para espesar), las guindillas, el pimentón, el comino, el orégano y el tomillo. Remueve todo con cuidado para que no se quemen las especias.
Inmediatamente después, vierte el vino blanco y deja evaporar el alcohol durante 3 minutos. Añade el tomate triturado, corrige de sal y deja cocer 10-15 minutos hasta que espese.
4. Cocinar los caracoles
Incorpora los caracoles a la salsa. Añade agua hasta que queden cubiertos y rectifica de sal y pimienta. Cocina a fuego lento durante 30-40 minutos, removiendo de vez en cuando.
Cuando la salsa esté espesa y los caracoles tiernos, el plato estará listo.
Consejos para que te salgan perfectos
- Más sabor: Como muchos guisos, este plato mejora si se prepara de un día para otro.
- Picante al gusto: Puedes ajustar la cantidad de guindilla o incluso usar pimienta de Cayena.
- Pan imprescindible: Sirve con pan artesano o de pueblo. ¡La salsa lo pide a gritos!
Otras cersiones de caracoles en España
Este plato tiene múltiples variantes según la región:
Caracoles a la madrileña
Una versión muy popular en Madrid, con salsa espesa, chorizo, jamón y toque de pimentón. Puedes probarlos en locales históricos como la Taberna Antonio Sánchez, donde los sirven con todo el sabor castizo de la capital.
Caracoles en caldo (Andalucía)
Menos picantes, se cocinan con hierbabuena y un caldo especiado. Son típicos en primavera.
Caracoles a la llauna (Cataluña)
Caracoles al horno con sal, aceite y especias, muy populares en Lleida. Se suelen acompañar de alioli o romesco.
Maridaje: ¿Con qué beberlos?
Este plato pide un vino tinto joven o con crianza ligera. También combina muy bien con cerveza artesanal tostada o vermut rojo, ideal para tomar en terraza.
Dónde comer buenos caracoles en Madrid
Si prefieres probar los auténticos caracoles en salsa picante sin cocinar en casa, te recomendamos visitar una de las tabernas con más historia de la ciudad:
Taberna Antonio Sánchez – Fundada en 1830, es uno de los locales más emblemáticos de Madrid. Sus caracoles son un clásico, cocinados con mimo y servidos en cazuela de barro. El ambiente taurino y castizo añade un plus a la experiencia gastronómica.